Los tratamientos de conductos radiculares o de raíces es una especialidad dentro de la profesión odontológica, denominada Endodoncia (*).
Este tratamiento se aplica, cuando una pieza dental ha debido enfrentar una caries con un grado de avance tal, que compromete la pulpa del diente (que es la parte central de la pieza dental) y que se halla ubicado en el centro del conducto de la raíz del diente.
Antiguamente (por decir algunas décadas atrás) cuando la pulpa o nervio del diente se dañaban, directamente eran extraídas las piezas dentales que estaban comprometidas en esa situación. Esto provocaba movimientos posteriores del resto de las piezas, y en muchos casos, ante la ocurrencia de más de un evento, problemas que comprometían una buena masticación.
Las etapas necesarias en el procedimiento
El endodoncista (odontólogo con esta especialidad) realiza su trabajo con la aplicación de anestesia localizada. El profesional ingresa en la pieza dental a través de la corona para acceder a la pulpa dentaria, para eliminar su contenido, procediendo a una desinfección.
Debido a que existen distintos tipos de piezas dentales, podemos encontrar aquellas como los premolares o molares que cuentan con más de un conducto radicular, por lo que se trata cada uno de ellos, verificando el avance con la toma de radiografías que mostraran el avance de la operación.
Una vez desinfectada la zona tratada, los conductos, ahora ya tratados se sellan para prevenir futuras infecciones.
La pieza dentaria puede quedar debilitada, ya que la pulpa que lo mantenía (vivo) estable estaba irrigada, por lo que la falta de esa nutrición lo pueden debilitar de tal manera, que pueda romperse a causa de su fragilidad. Por esa razón, es común que el profesional endodoncista, considere la necesidad de fortalecer la pieza con la construcción de una corona de contención.
La pérdida de hueso de la zona mandibular en donde se sostienen las piezas dentales, pueden sufrir una merma en su solidez, por lo que el control sobre la pérdida de hueso es importante para tomar las medidas correctivas del caso.
(*) Origen derivado del griego del término Endodoncia. “éndon”, significa: dentro, y “odóus”, significa pieza dental. Por último, la terminación de la palabra, o sufijo “ia”, significa acción o condición.