Evalúa las distintas opciones
Si tu odontólogo te ha sugerido la colocación de un implante de dientes, es probable que tengas muchas preguntas. Los costos podrán variar de acuerdo a los materiales que se utilicen, sin embargo trata de no enfocarte solo en el precio, ya que en algunos casos un tipo de implante quizás tenga un costo menor, pero el aspecto del diente puede no ser tan natural como el de otro de precio más elevado.
Recuerda que es importante que te informes acerca de los diversos implantes que existen, de sus características, así como de la tasa de éxito de cada uno. Te recomendamos que, dentro de tus posibilidades, solicites a tu odontólogo que utilice materiales de comprobada calidad. Estos son los que presentan un pronóstico más favorable y han demostrado mayor duración.
¿Qué tipos de implantes existen?
Si bien han surgido distintas clasificaciones, comúnmente los implantes se dividen en dos clases, de acuerdo a su ubicación en relación al hueso:
1.-Yuxtaóseos (subperiostales o subperiósticos):
No son colocados dentro del hueso, sino que recubren su superficie. Posee unos dispositivos en forma de silla de montar. La prótesis del diente se ancla en unos pilares. Generalmente son realizados con una aleación de cobalto, cromo y molibdeno, y en algunas ocasiones se recubren de cerámica o carbono. Estos implantes no se utilizan con mucha frecuencia; están indicados cuando la mandíbula presenta una alta reabsorción del hueso.
2.-Endoóseos (o intraóseos):
La mayoría de estos implantes son fabricados con titanio, material altamente biocompatible, aunque también pueden ser de cerámica o de carbón vitrificado. Se introducen en el hueso alveolar y pueden ser:
- Cilíndricos, dentro de los cuales encontramos:
- Roscados: tienen forma de tornillo, con rosca, por lo cual se logra un mayor contacto con el hueso.
- Por fricción: no tienen roscada la superficie y se fijan por retención química (por lo general, están recubiertos por hidroxiapatita, material cerámico) o por retención mecánica (suelen estar perforados a fin de que en su interior se desarrolle y se fije el hueso). Pero estos últimos no son utilizados con tanta asiduidad debido a la lentitud del proceso y a que su biomecánica no es tan buena como la de los roscados.
- Láminas perforadas: son de titanio y posee perforaciones a fin de que, a través de las mismas, el hueso se desarrolle. Las prótesis son ancladas a unos pilares soldados a las láminas. Suelen indicarse en los casos en los que el hueso alveolar es muy angosto como para colocar un implante cilíndrico.
- De cresta delgada: el pilar donde es fijada la prótesis responde a una ortodoxia odontológica ideal en relación al apoyo en la cortical y a la rigurosa inserción en la que no se utilizan resinas. Si se lo realiza adecuadamente, su instrumentación es reducida y prácticamente no presenta riesgos.
Busca al profesional indicado
Como has podido ver, tienes a disposición distintas alternativas, por lo cual te recomendamos acordar una cita con un especialista a fin de asesorarte convenientemente.
Como en toda cirugía, pueden existir riesgos, pero los mismos se reducen al mínimo si el procedimiento es realizado por un experto en la materia.
Un odontólogo entrenado en Implantología Oral posee la formación requerida para colocar un implante. Él analizará tus características personales para decidir, junto a ti, cuál es el implante más indicado para tu caso particular.
Si bien en ciertos casos surgen complicaciones con los implantes dentales y no puedes tener una seguridad total de que será bien aceptado por tu organismo, si consultas a un profesional calificado, tendrás mayores posibilidades de lograr un procedimiento exitoso y duradero.